En este blog aparecen algunas imágenes que encuentro por internet que,normalmente, son acompañadas del nombre de su creador. Sólo intento transmitir mi amor por el Arte, pero si alguien no quiere que aparezcan sus imágenes aquí sólo tiene que decírmelo e inmediatamente serán retiradas.

viernes, 13 de septiembre de 2013

LO QUE LA MUERTE DE MARAT ESCONDE

Voy a coger el toro por los cuernos y a combatir mi estado de desidia con lo que siempre he tenido rondándome la cabeza: el Arte. Me resisto a desintoxicarme de esta droga que durante años ha sido un placer administrarme y con la que me identifico y me identifican, como si de una huella dactilar se tratara.

No hace mucho estuve leyendo sobre el pintor francés Jacques Louis David, una interpretación sociológica e historiográfica de su obra y su participación ideológica en los acontecimientos políticos que se sucedían a su alrededor; pues bien, independientemente de la aportación estilística y lo que significó este artista para la Historia del Arte, sus obras contienen una importancia, desde el punto de vista interpretativo, que va mucho más allá de su maestría con el dibujo y la representación de la realidad, aunque como veremos no era tan fiel a la realidad como pueda parecer en un principio...

Para no enrollarme demasiado, os diré que Marat fue un diputado jacobino, defensor del pueblo francés y del republicanismo, hasta el punto que era partidario de guillotinar al mismísimo Luis XIV, como así sucedió en enero de 1793. En julio de ese mismo año Marat fue asesinado por Charlotte Corday, del bando de los girondinos, con un cuchillo de cocina con el mango negro de madera de ébano, que le atravesó el costado derecho, mientras que disfrutaba de un baño que aliviaba sus problemas de piel en un cuarto de baño pequeño, con un mapa de Francia en la pared y una sola ventana, en una bañera redonda, vestido con una bata y un turbante blanco, mientras escribía apoyado sobre una plancha. Todos estos datos están detalladamente documentados y por ello sabemos también que la asesina escribió una carta que se encontró tras su arresto, muy pocos días después.

J.L.David
La muerte de Marat (1793)
Ahora, analizando el cuadro de Louis David nos damos cuenta que: el mango del arma del crimen es blanco, en lugar de negro; el Marat representado es joven, y sin atisbos de problemas dermatológicos; la estancia donde se encuentra es neutra, sin ventana ni mapa que interrumpa la visión; Marat está desnudo, no tiene puesta ninguna bata; la bañera redonda, aquí se representa rectangular; la tabla sobre la que se apoyaba para escribir está totalmente tapada con un paño verde, y se coloca una caja con un tintero, dinero y una carta; Marat tiene en su mano la carta de Charlotte, la que apareció en poder de la susodicha al ser arrestada; a pesar de la violenta muerte del protagonista, yace plácidamente, incluso se asoma una sonrisa en su boca. Son detalles que quizás el espectador de hoy no perciba, principalmente por el desconocimiento de los hechos acontecidos, sin embargo el espectador de aquel momento conocía al dedillo todos los detalles y por lo tanto a este cuadro le correspondía una interpretación totalmente "interesada" e intencionada, que respondía a intereses constitucionales y rousseaunianos, con la pretensión de crear un mito entre el pueblo francés en la figura de Marat, que encarnaría la virtud, austeridad y grandeza, frente a la indignidad de su asesina.

Paul Baudry
Charlotte Corday (1860)
No deja de ser llamativo que esta construcción de un nuevo héroe o incluso mártir de la Revolución, disfrace, o mejor dicho omita, el hecho de que Marat fue un personaje crucial en el empleo de la guillotina, pues ese aspecto no podía manchar la imagen que de él se quería construir. O lo que es lo mismo: m a n i p u l a c i ó n. Y se hace más evidente si la comparamos con otras obras del mismo tema pero realizadas por artistas de diferente ideología, como es el caso de Paul Baudry, cuya visión de los personajes que intervinieron en la historia es claramente diferente.

El Arte no es sólo cuestión de estética; el Arte ha sido, es y será un instrumento usado por el poder para transmitir mensajes, incluso manipulando subliminalmente al espectador relajado. Este es sólo un pequeño ejemplo de lo que el Arte esconde y hoy día se ha extendido a otro tipo de manifestaciones artísticas difundidas por los mass media, como puede ser el cine o la publicidad. Os aconsejo que a partir de ahora miréis de forma más crítica las imágenes que nos rodean, porque detrás de ellas no dudéis que encontraréis intereses políticos y económicos... pero que eso no os prive de seguir disfrutando del Arte.

2 comentarios:

  1. No hay nada nuevo bajo el sol. Aunque además de manipulación interesada puede ser la visión del artista o las licencias de que se dota. Estoy pensando en esos cuadros de Julio Romero y la amalgama de lugares, algunas veces, por no decir todas, de los horizontes de los mismos. El fondo es al albedrío del pintor. De todas formas lo de Marat era una cuestión de Estado. Enhorabuena por la entrada.

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  2. Nuestro Julio era un gran simbolista y un maestro de la alegoría. Los grandes maestros no dejaban nada al azar, ni siquiera un "simple" fondo. Ya lo he dicho otra veces; lo mejor del Arte es conocer los significados y los porqués, así el disfrute es mucho mayor.

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